¿Dónde invierten los españoles?
Ahora que parece abrirse una nueva etapa en donde los españoles nos vamos reponiendo de las deudas adquiridas y comenzamos a recuperar nuestra economía, el crowdlending se muestra como la mejor opción de inversión en este nuevo panorama económico. Pero ¿dónde invierten los españoles?
Desde que la burbuja inmobiliaria explotó y comenzó una de las peores crisis que ha vivido nuestro país, tuvimos que aprender de qué manera poder adaptar nuestra economía a la nueva situación que se abría ante nosotros. El ladrillo, que fue durante mucho tiempo el activo favorito donde depositar nuestro dinero, cambió su valor radicalmente de la noche a la mañana obligándonos a aprender a reorientar nuestros hábitos tanto de consumo como financieros.
¿Pero cómo se ha producido el cambio? ¿Hemos conseguido finalmente los españoles cambiar nuestra forma de invertir? Hagamos primero una pequeña parada para observar cómo ha sido la evolución del comportamiento inversor de los hogares españoles.
Historia de la economía familiar
Desde hace tres décadas el patrimonio de las familias no ha parado de crecer, como tampoco paró de hacerlo el endeudamiento. En concreto entre 2002 y 2007 la burbuja inmobiliaria elevó en un 73% el patrimonio doméstico, al mismo tiempo que las deudas lo hacían en un 115%. Concretamente en 2007 los pasivos de las familias alcanzaron los 936.000 millones de euros, tocando su máximo un año después en los 965.000 millones de euros.
El estallido de la burbuja inmobiliaria retrasó el crecimiento desmesurado que tuvo en los años anteriores el patrimonio familiar medio, como también hizo más evidente la necesidad del ahorro, lo que ha ido reduciendo la cifra de los pasivos adquiridos hasta dejarlos en 835.000 millones de euros.
En cuanto a lo que a inversiones se refiere, los depósitos bancarios siguen constatándose como el primer lugar de las preferencias españolas. Con respecto a la bolsa, los fondos de inversión siguen siendo los más elegidos y, aunque la mejora de las perspectivas de la renta variable está aumentando la confianza en ella, todavía invertimos en este tipo de activos un 22% menos que antes de la crisis, situándonos muy lejos de los 818.000 millones que destinábamos en el 2006.
El futuro de las inversiones para los españoles
Pero ¿cómo se presenta el futuro? Aunque es cierto que tras la crisis la opción del ladrillo ha dejado de ser la principal alternativa donde invertir nuestro dinero, la realidad es que el inversor español sigue siendo conservador a la hora de elegir donde depositar su dinero. ¿Pero serán nuestras antiguas opciones rentables en un futuro?
Este mes el Banco Central Europeo sacó toda su artillería para conseguir recuperar la confianza en las economía europea. Para ello anunció el QE (Quantitative Easing o Expansión Cuantitativa en español), que no es más que una compra masiva de deuda. ¿Cómo puede afectar esto en la economía familiar?
Los depósitos bancarios podrán reducir aún más la baja rentabilidad que ofrecen, por lo que parece que va siendo hora de cambiar nuestras preferencias. Por su lado, la renta fija será un gran receptor de las inyecciones de liquidez del Banco Central Europeo, por lo que será muy posible que los intereses de la deuda pública bajen y se mostrará poco rentable para los que quieran invertir en ella.
Las divisas y la renta variable se presentan como una buena opción de inversión en esta nueva etapa económica en Europa, pero puede ser una elección bastante osada para aquellos que no conozcan en profundidad el comportamiento de estos activos, por ser una alternativa compleja y arriesgada.
La diversificación se presenta como una de las opciones más factibles y más sensatas, sobre todo para aquellos que no sean expertos en ningún tipo de producto financiero. Se trata de dividir el capital disponible en diferentes inversiones, para que la rentabilidad que puedas obtener no dependa únicamente de uno solo de los activos. En este sentido el crowdlending se presenta como una de las mejores opciones que ahora hay disponibles.
El crowdlending: ¿una inversión interesante para los españoles?
Ante este nuevo paisaje económico en el que las antiguas opciones de inversión están perdiendo su rendimiento pasado y, en donde el nuevo inversor español que se ha formado después de la crisis busca nuevas alternativas donde depositar su dinero, el crowdlending surge como la opción ideal para las nuevas inversiones.
El crowdlending consiste en la posibilidad de que cualquiera de nosotros pueda ganar dinero de manera responsable invirtiendo, por ejemplo, en eficiencia energética. Con una inversión mínima de 50 euros se puede formar parte de una inversión colectiva para financiar a proyectos de la economía real cuyo objetivo sea la mejora nuestro entorno. El crowdlending pues, deja en el olvido la economía especulativa protagonista del pasado.
La participación del inversor en el crowdlending se realiza en forma de préstamo, que se le devuelve en pequeñas cuotas mensuales con un calendario previamente pactado y con un interés que normalmente superará el 5%, superando de lejos la rentabilidad ofrecida por cualquier otro tipo de depósito bancario. Además, con el crowdlending puedes diversificar fácilmente tu cartera invirtiendo en tantos proyectos como quieras, y de esta forma estarás ayudando de diferentes formas a conseguir un impacto positivo en la sociedad o en el medio ambiente al mismo tiempo que amplias tus posibilidades de beneficio.
El crowdlending se presenta como la opción más solvente para un nuevo tipo de inversor español que quiere huir de la antigua economía especulativa y que busca mejores lugares de donde sacar rentabilidad a su dinero mientras ayuda a financiar proyectos de inversión de la economía real.
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